TIJUANA, B.C., A 23 DE FEBRERO DE 2012.- El Sistema Educativo Estatal (SEE) en Tijuana a través de la Coordinación Educativa llevó a cabo este día el seminario denominado “El Bibliotecario como Mediador de la Lectura en Educación Secundaria”.
El evento tuvo como objetivo el fortalecer el fomento a la lectura como medio para alcanzar el logro educativo en el nivel secundaria, así como generar un espacio de formación para los participantes y fortalecer con ello los servicios bibliotecarios que ofrecen estas instituciones a favor del mejoramiento de las prácticas docentes.
César Sánchez Frehem, delegado del SEE destacó la tarea del bibliotecario en la educación de los jóvenes y los invitó a seguir fomentando el hábito de la lectura entre los mismos, con la finalidad de que los estudiantes estén mejor preparados académicamente.
Indicó que representa un reto el competir contra los medios electrónicos, el internet y las tecnologías de la información y atraer a los estudiantes hacia los libros, pero dijo estar seguro de que gracias a la ayuda de los bibliotecarios, maestros y padres de familia, se logrará el objetivo de crear estudiantes aficionados a la lectura.
La autoridad educativa, declaró que ese tipo de seminarios funciona para ver resultados, tanto positivos como negativos, para después implementar cambios y estrategias que se considera deben aplicarse para obtener mejores resultados.
Por su parte, el Coordinador Estatal del Programa Nacional de Lectura (PNL), Apolinario Rentería Tovar, expresó que los resultados del buen hábito de la lectura en los alumnos, se ve reflejado en el logro académico, es decir, que la lectura, ayuda al rendimiento y mejoramiento escolar de los niños y jóvenes en las aulas.
El PNL propone mejorar las competencias comunicativas en los estudiantes de educación básica y favorecer el cambio escolar a través de una política de intervención que asegura la presencia de materiales de lectura que apoyen el desarrollo de hábitos lectores y escritores de alumnos y maestros.
Este está constituido por cuatro líneas estratégicas: fortalecimiento curricular y mejoramiento de las prácticas de enseñanza; fortalecimiento de las bibliotecas y acervos bibliográficos en las escuelas de educación básica, normal y en centros de maestros; formación y actualización de recursos humanos y la generación y difusión de información.
Como tarea principal el bibliotecario deberá lograr un impacto importante en el ambiente donde se desenvuelve, y concretar en la biblioteca escolar el concepto de cultivar la cultura y la lectura dentro de su entorno educativo, para esto podrá apoyarse a través de actividades dinámicas, creativas y recreativas encaminadas a la promoción de la misma.
El cumplimiento de su rol como promotor de la lectura permitirá que la biblioteca se convierta en un entorno motivador de la imaginación y enseñanza de los valores éticos y estéticos.
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